Cookies con chispas de chocolate: clásico americano con toque español

🍪 Introducción

Las cookies con chispas son un clásico atemporal de la repostería americana, pero en mi cocina española las he adaptado con ingredientes de calidad y técnicas que garantizan un resultado perfecto: doradas por fuera, tiernas por dentro y con chispas de chocolate que se funden en cada bocado. Esta receta es ideal para principiantes y expertos, y se prepara en menos de una hora. Es perfecta para meriendas, desayunos, regalos o simplemente para consentirte. ¡No necesitas ser un pastelero para lograr unas cookies irresistibles!

⏱️ Tiempos de Preparación

🛒 Ingredientes (para 12 cookies)

• 125 g de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
• 100 g de azúcar moreno (o blanco si prefieres menos sabor)
• 50 g de azúcar blanco
• 1 huevo grande (aprox. 60 g)
• 1 cucharadita de extracto de vainilla
• 150 g de harina de trigo (tipo 00 o común)
• 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
• 1/4 cucharadita de sal fina
• 100 g de chispas de chocolate (o trozos de chocolate negro 70%)
• Opcional: 1 cucharada de harina de avena para dar textura extra

🍳 Preparación paso a paso

1. Precalienta el horno y prepara la bandeja
   Precalienta el horno a 180°C (con calor arriba y abajo). Forra una bandeja de horno con papel de hornear. Esto evitará que las cookies se peguen y facilitará su limpieza.

2. Bate la mantequilla y los azúcares
   En un bol grande, coloca la mantequilla a temperatura ambiente y bátela con una cuchara de madera o batidora eléctrica hasta que esté cremosa. Añade el azúcar moreno y el azúcar blanco, y sigue batiendo hasta que la mezcla esté homogénea y ligeramente esponjosa. Este paso es clave: cuanto más batas, más aire incorporarás y más tiernas quedarán las cookies.

3. Incorpora el huevo y la vainilla
   Añade el huevo y el extracto de vainilla. Bate hasta que esté completamente integrado. Si la mezcla se separa un poco, no te preocupes: es normal. Solo sigue batiendo hasta que se una.

4. Mezcla los ingredientes secos
   En otro bol, tamiza la harina, el bicarbonato y la sal. Tamizar ayuda a que no queden grumos y que la masa quede más ligera. Si usas harina de avena, añádela ahora.

5. Combina los ingredientes húmedos y secos
   Incorpora poco a poco la mezcla de harina a la mezcla de mantequilla, batiendo con movimientos envolventes hasta que se integre. No batas en exceso: la masa debe quedar homogénea pero no elástica. Si queda muy seca, puedes añadir 1 cucharadita de leche o agua.

6. Añade las chispas de chocolate
   Incorpora las chispas de chocolate (o trozos de chocolate negro) y mezcla con una espátula hasta que estén distribuidas uniformemente. Si usas chocolate en tableta, córtalo en trozos pequeños de 0,5 cm.

7. Forma las cookies
   Con una cuchara o una porcionadora de helado, forma bolas de masa de unos 30 g cada una (aproximadamente el tamaño de una nuez grande). Colócalas en la bandeja dejando unos 5 cm de separación entre ellas, ya que se expandirán al hornearse.

8. Hornea hasta dorar
   Hornea durante 10 a 12 minutos, hasta que los bordes estén dorados pero el centro aún se vea ligeramente blando. No las dejes demasiado tiempo: es mejor sacarlas un poco tiernas porque seguirán cocinándose con el calor residual.

9. Enfría y disfruta
   Saca la bandeja del horno y deja que las cookies se enfríen sobre la bandeja durante 5 minutos. Luego, transfiérelas a una rejilla para que se enfríen completamente. Así mantendrán su textura crujiente por fuera y tierna por dentro.

🥗 Información Nutricional

💡 Consejos y variaciones

• Para cookies más crujientes: Usa solo azúcar blanco y hornea 1-2 minutos más.
• Para cookies más tiernas: Usa solo azúcar moreno y reduce el tiempo de horneado en 1 minuto.
• Sin gluten: Sustituye la harina de trigo por harina sin gluten apta para repostería.
• Con nueces o pasas: Añade 50 g de nueces picadas o pasas de uva para darle un toque crocante o frutal.
• Con chocolate blanco o leche: Combina chispas de chocolate negro con blanco o leche para un sabor más dulce.
• Para regalar: Envuélvelas en papel de celofán y atadas con una cinta. ¡Un detalle perfecto para cualquier ocasión!

Estas cookies son versátiles, fáciles de hacer y siempre triunfan. ¡Anímate a probarlas y personalizarlas según tu gusto!